Zoonogía y antropogonía en Anaximandro de Mileto

En una entrada anterior de este blog escribí sobre la cosmología de Anaximandro de Mileto. En ese texto incluía brevemente una anotación muy interesante hecha por este filósofo. A saber, que Anaximandro sostenía que los cuerpos humanos provenían de los peces.
En el libro Los filósofos presocráticos de Kirk, Raven y Schofield, se realiza una exposición más exhaustiva sobre esta original idea.
Incluyo a continuación un extracto de este apartado del libro:


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Zoonogía y antropogonía en Anaximandro de Mileto

'Anaximandro dijo que los primeros seres vivientes nacieron en lo húmedo, envueltos en cortezas espinosas (escamas), que, al crecer, se fueron trasladando a partes más secas y que, cuando se rompió la corteza (escama) circundante, vivieron, durante un corto tiempo, una vida distinta.'
Aecio

'Dice además que el hombre, en un principio, nació de criaturas de especia distinta, porque los demás seres vivos se ganan la vida en seguida por sí mismo y que solo el hombre necesita de una larga crianza; por esta razón, de haber tenido su forma original desde un principio, no habría subsistido.'
Plutarco

'El milesio Anaximandro creyó que del calentamiento del agua y de la tierra nacieron peces o animales muy semejantes a ellos; en su interior se formaron hombres en forma de embrión, retenidos dentro hasta la pubertad; una vez que se rompieron dichos embriones, salieron a la luz varones y mujeres, capaces de alimentarse'
Censorino

'Los animales nacen de lo húmedo evaporado por el sol. El hombre fue, en un principio, semejante a otro animal, a saber, el pez.'
Hipólito

'Ésta es la razón por la que veneran también (los Sirios) al pez, por creer que es de raza similar y pariente, y a este respecto filosofan de un modo más razonable que Anaximandro; pues este manifiesta que los peces y los hombres no nacieron de los mismos padres; sino que los hombres, en un principio, nacieron dentro de los peces y dentro de ellos se criaron, como los tiburones, y que, cuando fueron capaces de cuidarse por sí mismos, salieron a la luz y posesionaron la tierra.'
Plutarco


Estos serían prácticamente todos los testimonios que se conservan acerca de las conjeturas de Anaximandro respecto a los orígenes de la vida animal y humana.
Según él los primeros seres vivos nacieron del limo por efecto del calor del sol. [ Esta interpretación llegó hasta Aristóteles, quien aceptó la generación espontánea en tales casos. ]
Se creía que los primeros seres vivos estaban cubiertos de escamas espinosas - como los erizos de mar, según sugerencia de Cornford.  Y parece que Aecio registra una información especial sobre este tipo de criaturas, que es de suponer que fueran anteriores a los animales semejantes a los peces en que fueron criados los hombres.
Es muy discutido el significado de las palabras finales del testimonio original de Aecio en griego: el uso de μετα- en los compuestos nuevos del griego tardío implica un cambio más que una sucesión, y probablemente en este contexto significaba que las criaturas, una vez salidas de su cáscara, continuaron viviendo una vida diferente (en tierra firme) durante un corto tiempo.
Es posible que Anaximandro tuviera cierto conocimiento de las dificultades de adaptación al medio ambiente. Tal idea no sería menos sorprendente que su observación de que el hombre (con sus nueve meses de gestación y su debilidad durante los primeros años) no podría haber sobrevivido en las condiciones primitivas sin una cierta protección especial.
Esta sería la consideración que le indujo a conjeturar que el hombre se crio en una especie de pez - probablemente porque la tierra fue en su origen húmeda y los primeros animales fueron los del mar.
Según él los principio generales del desarrollo del nacimiento serían los siguientes: la humedad está contenida en un tegumento corticoso y el calor, de alguna manera, causa una expansión o explosión de la cáscara y la liberación de una forma completa en su interior.

Anaximandro realizó el primer intento de explicar de un modo racional el origen del hombre.
No todos sus sucesores se ocuparon de la historia del hombre (se interesaron más por su condición) y ninguno le aventajó en la ingeniosidad de sus teorías.
A pesar de que las fuentes que tenemos son muy incompletas,  nos muestran que su explicación de la naturaleza (a pesar de ser una de las más antiguas) fue una de las más amplias en su alcance y la más imaginativa de todas.




Texto extraído de:
G.S. Kirk, J. Raven, M. Schofield (2019). Anaximandro de Mileto. En: Los filósofos presocráticos. Barcelona, España: Editorial Gredos

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